Bogotá, 13 de agosto. La Asociación Colombiana de Administradoras de Pensiones y Cesantía – Asofondos, expresa su preocupación por la reciente renuncia de la totalidad de los miembros de su Junta Directiva, de Empresas Públicas de Medellín, EPM, con excepción de su Presidente, el Sr. Alcalde de Medellín. De acuerdo con la comunicación enviada por estos directores, su renuncia se produjo “al no estar de acuerdo con el actual manejo que se le viene dando a temas tan fundamentales para el presente y futuro del Grupo EPM y el reiterado desconocimiento a la Junta Directiva, nos vemos obligados a presentar nuestra renuncia como miembros de ésta”. Evidentemente, esta declaración unánime de ocho de los nueve miembros de la junta, en la que se menciona que las decisiones las está tomando el Sr. Gerente de EPM sin discutirlas con la Junta, deteriora la credibilidad de los inversionistas en que el manejo de la empresa se hace con estándares profesionales y regidos por las mejores prácticas de gobierno corporativo.
Más allá de las fortalezas competitivas, comerciales y financieras de una empresa, o su eficiencia en el cumplimiento de su objeto social, el respeto de las reglas de gobierno corporativo y la adopción de decisiones claves para el futuro de la misma a través de procedimientos deliberativos adecuados, aún en situaciones de urgencia, son la garantía para que actores tales como los fondos de pensiones participen en el desarrollo de empresas sólidas que garanticen rendimientos adecuados a sus afiliados. Gracias a la historia de manejo de sus recursos y de gobierno corporativo de EPM, los fondos de pensiones de Colombia han colaborado con su expansión e inversiones adquiriendo bonos corporativos, en un monto que en la actualidad se sitúa en casi $3 billones de pesos, recursos que son en realidad parte de los ahorros de los trabajadores colombianos.
El respeto de estos principios del buen gobierno corporativo resulta especialmente relevante cuando se trata de empresas en las que participan tanto particulares como entidades públicas. Sin el respeto del gobierno corporativo y de las reglas de transparencia y deliberación, la adopción de decisiones de manera intempestiva o unilateral, convierte dichas acciones en actos inadecuados para proteger a la empresa y a sus inversionistas.
Respetuosamente, solicitamos que, para mantener una relación armónica y fortalecer la confianza de sus inversionistas, Empresas Públicas de Medellín (i) adopte los correctivos necesarios para que situaciones como las descritas no vuelvan a repetirse, (ii) recomponga a la mayor brevedad la Junta con miembros realmente independientes y con una trayectoria profesional comprobada, y (iii) permita que esta nueva Junta revise las decisiones tomadas sin la aquiescencia de la Junta, de tal forma que retorne las mejores prácticas de gobierno corporativo para proteger a la empresa y a sus inversionistas.